Terroir D.O Lo Abarca

Un premio de la naturaleza, un vino excepcional.

En Casa Marin, nuestro terroir es un regalo extraordinario de la naturaleza, moldeado por la cercanía al mar y las condiciones únicas de Lo Abarca. Este rincón costero, una vez sumergido bajo el océano, es ahora el hogar de suelos ricos en granito, calcáreo y depósitos marinos, que aportan un carácter inconfundible a nuestros vinos.

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Con el 90% de nuestros viñedos plantados en laderas de diferentes orientaciones, Lo Abarca presenta un microclima singular. Las temperaturas promedian menos de 14°C, con máximas que rara vez superan los 26°C incluso en los días más cálidos del verano. Este clima, comparable al de Inglaterra pero con el sol radiante del Mediterráneo, marca una diferencia notable frente a otros valles cercanos como Leyda y Casablanca, haciendo de Lo Abarca un lugar único para la viticultura.

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Casa Marin cuenta con 38 hectáreas divididas en 57 pequeños cuarteles, cada uno con su propio micro-terroir. Estos cuarteles reflejan nuestra obsesión por los detalles y están representados en nuestras cápsulas y corchos, destacando la exclusividad de cada botella. A diferencia de los viñedos más planos del mundo, nuestras laderas y bajos rendimientos —de apenas 3.500 kg por hectárea— nos posicionan al nivel de los viñedos Grand Cru más prestigiosos.

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Desde 2018, Lo Abarca ha sido reconocido como Denominación de Origen por el SAG, un logro que nos distingue como la única viña en Chile con su propia DO. Este reconocimiento valida nuestra apuesta por un terroir excepcional, que nos permite crear vinos inigualables y premiados por su calidad y carácter.

Cuando descorchas un Casa Marin, estás degustando la esencia de un terroir irrepetible, un verdadero premio de la naturaleza.